10/2/11

Una entrada a medias con Blog de Madre

Hoy vamos a hacer una pausa en el camino de la Semana del Amor, para hacer una colaboración con un blog que me encanta: Blog de Madre
En ese blog, Eva, una madre joven y muy ocurrente, cuenta con mucha gracia las peripecias de su día a día. Yo desde la primera vez que entré me hice fan, porque no se puede contar con tanto arte cosas que vamos a vivir todas (las que pensamos tener hijos, claro), y de las que por supuesto, nos querríamos librar, como que se te salga el ombligo en la recta final del embarazo, o te pinten el sofá, pero claro, cuando eres madre, esas cosas no son malas, son casi buenas.
Así que hoy os dejo con una entrada conjunta, con Texto de Eva Quevedo e ilustración mía, que espero que os guste :)

Ilustración "Ve hacia la luz" by La Princesita


Buenas, me llamo Eva, soy Madre y soy inmortal

Ésta bien podría ser mi presentación formal ante un cónclave secreto de Madres Reaccionarias que se reúnen en algún oscuro sótano cada jueves, con bata de boatiné, rulos térmicos y zapatillas con borlas, para juntas castañetear dientes y ponerse malas de sólo pensar en abandonar esta dimensión dejando los deberes a medio hacer. ¿Irme y dejar a Lasniñas aquí y no verlas crecer, ni echarse novio ni hacerse un pearcing?, ¿Estamos locos, o qué? Pero si hay días que incluso me voy a regañadientes al cine porque al llegar ya estarán dormidas…

Decidí ser inmortal la semana pasada mientras me sometía voluntariamente, bueno casi, a una resonancia de rodilla. Este cuerpo mío no debió asimilar demasiado bien los catorce kilos de vellón con que le sorprendí en el último embarazo y la fila de abajo del inmenso castellet en que me convertí sufrió algún que otro pequeño destrozo por sobrecarga en la zona del menisco y adyacentes.

Tumbada dentro de aquel cilindro espacial, sintiéndome como el relleno humano de un tremendo canelón, de repente me invadió un miedo pavoroso a que mi cuerpo decida estropearse antes de tiempo y un día nos dé a todos un mal susto. Tengo muchos planes para él así que su emancipación voluntaria y escisión de los planes familiares me ocasionaría gran disgusto. Antes, cada vez que me rondaba la idea de la muerte jugueteaba con ella con esa vena a medio camino entre el morbo y el melodrama que todos sufrimos alguna vez, pensando en ella como el que abandona una fiesta y sale a la calle a ver si pilla un taxi: Oye, que me lo he pasado estupendamente pero que se me va haciendo tarde y ya sabes tú cómo son estas cosas. Muac, muac, que si eso ya nos vemos en otra ocasión…

Todo en regla, todo en orden, empaqueto y me voy.

Pero ya no.

La verdad es que decidí ser inmortal así, de repente, porque en el fondo de mi ser habita una profunda vagancia, despeinada y sumamente modorra, y morirme me acarrearía demasiado trabajo de organización previa. Tendría que grabar uno de esos vídeos caseros contándoles a Lasniñas los sinsabores de la vida en un intento egoísta por seguir aquí y que no se olviden nunca de mi cara; confeccionar un bonito álbum de fotos, momentos y flores secas en lugar de tenerlas distribuidas toscamente por carpetas en el interior del portátil; seleccionarles entre un amplio casting una madrastra mona y salada que no esconda disfraz de bruja y que las quiera mogollón, les cepille el pelo sin tirones y recuerde que no les gustan los rollitos de pavo con queso dentro; tatuarle a Marido mi nombre y foto de perfil en la nalga izquierda, en caligrafía elegante y lustrosa, capaz de sorprender gratamente a toda aspirante a madrastra mona y salada que pase por allí… No sé…tendría que hacer tantas y tantas cosas…

Una vez decidida mi inmortalidad la considero inamovible, les advierto, que no tengo yo por costumbre cambiar de idea así como así ni someter mi juicio interno a consejo ajeno. Pregunten si no me creen.

Quizá por desconocimiento tomen ustedes esta decisión mía como un rasgo de carácter prepotente, bien rayano en la vanidad más absoluta o en el gusto insano por la mezcla de psicotrópicos y anís del mono. Pero nada más lejos. Aunque se me tunee de orgullo, esta afirmación no es más que el fruto de la más grande de las cagaleras, aquella que llega tras la súbita relajación de esfínteres que provoca Elmiedo. Me aterra irme y no formar parte de sus vidas, ni de sus guerras, ni de sus partidas de parchís. No quiero. No, no y no, y no me da la gana.

Sé que este recurso a la pataleta de poco escudo me servirá llegado el momento, cuando algún esqueleto esmirriao y asido a una guadaña de lo más tosco y rural me invite a echar unos bailes lejos, lejos de aquí; pero no sé hacerlo de otra manera. Este gusto mío por prometer imposibles quizá sea el responsable directo de que siempre pierda los órdagos a grande y acabe los muses con un lastimero uppss o de que enamorara a Marido allá por mi juventud, asegurándole que sería capaz de encender fuego en una isla desierta, sin más aparejos que un par de palos y mi férrea voluntad.

Morirme no entra en mis planes, a dios pongo por testiga. Antes tengo que hacer muchísimas cosas y, la verdad, no tengo horas en el día pa.

18 comentarios:

Felipe dijo...

Oooooh!! flechazo de fan total!!

la princesita dijo...

¿Has visto? ¡es que es muy buen blog! ;)

Marina dijo...

que precioso, que bonito, emocionada estoy en la oficina tras mi pantallón, fingiendo un mal ataque de alergia espontáneo. Gracias!

la princesita dijo...

Gracias Marina, aunque el mérito de hoy no es mío, es de Eva ;)

Unknown dijo...

viva la princesita!!!!!!

Anónimo dijo...

Desoná! Mérito compartido que la ilustración es de lo más dulce que he visto...y el temita lo necesitaba. Gracias por haber hecho que el post de hoy sea así de especial!!!!

la princesita dijo...

@Belén

Viva!!!...digo, Gracias!!! jajaja

@blogdemadre
Tus post siempre son especiales, solo que hoy además, también es ilustrado ;)

Yolanda dijo...

Que chulo..... yo tambien voy a ser madre inmortal, porque me da la gana y quiero.

la princesita dijo...

Pues claro que si! eso es como cumplir siempre 30, cada uno cumple los que quiere! pues cada uno es importal si quiere tambien! ;)

Anónimo dijo...

Siempre te qda la opción Medium, e irte apareciendo por diestra y siniestra... Aunq sí, yo también me inclino por tu opción inmortal, pese al hecho de que Lasniñas todavía no han hecho aparición en mi vida... Pero ya dicen por ahí que más vale prevenir... ¿¿No??

Unknown dijo...

Que bonito el blog si! Gracias!

Cotilla Cósmica dijo...

jo que he llorado con lo de los rollitos de pavo y queso... :_) que pedazo de madre y de mujer!!!

supercursi dijo...

¡blogazo! no lo conocía y me estoy riendo aquí sola a carcajadas :D

la princesita dijo...

@noemozica

Pues yo espero que mi madre no se haga la de Medium, porque yo creo que veo un muerto.. ¡y me caigo redonda al suelo! jajajaja

@Lidia

¡De nada! ¡ya sabeis que me gusta compartir las cosas bonitas que veo! ;)

@Eva de andar por casa

Es que el blog es enterito mortal, te recomiendo verlo entero cuando vayas teniendo tiempo, sobre todo ahora estás como chof, porque tiene mucho arte, y te va a alegrar, ¡ya verás! :)


@supercursi

¿Es mortá eh? ¡me flipa!

Anónimo dijo...

Ya mismito me hago fan! He dicho...

Por cierto, yo también me voy a pasar a la religión de los inmortales, aunque no sea madre (todavía) :D

la princesita dijo...

Yo no sé, me lo estoy pensando, es que igual me harto...pero quizás lo digo ahora que aun no tengo descendencia, jajajaja

Kiri and Carla dijo...

Aiii, me ha encantado!!!! :_)

Bicho dijo...

Yo debo reconocer que no soy para nada "fan del universo maternidad", pero al leer esta entrada no he podido evitar que se me escapara una sonrisa enorme.

Muy bueno el texto y la ilustración! Una delicia pasar por aquí y conocer El Blog de Madre ;)

Saludos!